FINANZAS | 24.06.2020
“Una buena inversión te tiene que dejar dormir tranquilo”
Los datos macroeconómicos siguen marcando el ritmo de los mercados.
Esta semana, el índice Ifo de confianza empresarial en Alemania volvió a ser mejor de lo previsto, como ocurrió también con los datos de PMI. Sin embargo, como explica Alberto Matellán, economista jefe de MAPFRE Inversión, en una entrevista con A Media Sesión de Radio Intereconomía, “hay que ver de dónde vienen esos datos, porque son encuestas y estas dependen mucho del contexto”. Y es que, en su opinión, esas referencias no se pueden trasladar de forma directa a variables mucho más importantes, como el PIB o el empleo. Por tanto, todavía es pronto para afirmar que la recuperación está siendo mejor de lo previsto.
Otro de los factores que preocupa a los inversores es la posibilidad de nuevos rebrotes. Por ahora, como explica Matellán, “no se han producido nuevos confinamientos y parecen estar controlados”. “Este riesgo es incluso más importante que los datos económicos para la evolución de las bolsas en las próximas semanas”, añade. Y la semana que viene, las compañías empiezan a poner al día sus cuentas, lo que, de nuevo, reflejará el daño provocado por el cierre total de las economías.
Matellán cree que, aunque todos sabemos que el segundo trimestre ha sido el más duro, hay cierto margen para que se produzcan sorpresas positivas. Aun así, incide en que “hay que quedarse con una visión a más largo plazo, es decir, hay que mirar cómo esas compañías pueden recuperarse en los próximos años, que es lo que compra un inversor en Bolsa”. “Esas presentaciones, en su opinión, van a ser importantes por el guidance que nos ofrezcan las compañías hacia el futuro”, insiste.
En este contexto, Matellán recomienda una cartera ajustada al perfil del inversor. “Si soy un inversor conservador, aunque todas las carteras pueden sufrir en momentos como el actual, sé que no me va a impactar tanto. El pequeño inversor tiene la ventaja sobre el institucional de que ya tiene el escenario dibujado”. Y concluye: “Una buena inversión te tiene que dejar dormir tranquilo”.
