“Los ETF tienen su hueco en el mundo de la inversión, pero prefiero la gestión activa” 

En total, respondió a quince cuestiones, en las que incluyó recomendaciones sobre inversión en determinados sectores, así como por tipología de productos, como, por ejemplo, los fondos sostenibles o con criterios ESG en los que MAPFRE AM, la gestora del grupo asegurador, ha puesto el foco.

Jiménez considera que “ahorrar va a ser consecuencia de la crisis, como forma de protegernos ante la incertidumbre”. El experto recuerda que, a medio y largo plazo, la renta variable suele el mejor activo, tanto directamente como a través de fondos de inversión y productos de seguros. “En el contexto actual, recomendaría carteras bien diversificadas, con una gestión activa prudente. También mixtos al 50%, como MAPFRE Capital Responsable, donde la inversión socialmente responsable puede apoyar a la resolución de la crisis”.

En su opinión, el efectivo y la renta fija no aportan mucho potencial de rentabilidad. “El efectivo puede ser una forma de proteger el patrimonio pero a medio y largo plazo si se quiere obtener rentabilidad hay que asumir cierto riesgo”, señala. “Con las medidas de los bancos centrales, la renta variable se ha convertido en el activo más buscado, aún a pesar de las increíbles valoraciones de muchas compañías. Hay que ser muy oportunista con las compras y las ventas porque se van a producir muchas posibilidades en los próximos meses”, reitera.

Por regiones, el experto de MAPFRE reconoce estar “sobreponderados” en Estados Unidos, “pero poco a poco vamos subiendo el peso en Europa, en una proporción del 60%-40%”. Y reconoce que en los países emergentes habrá que tomar posiciones, pero cuando haya pasado la pandemia.

En cuanto a instrumentos específicos, Jiménez cree que “los ETF son un instrumento barato para invertir al ser una cesta diversificada de acciones”. “Tienen su lugar en el mundo de la inversión y nosotros los podemos utilizar puntualmente para realizar algunas inversiones”. Sin embargo, el experto prefiere la gestión activa por cuatro motivos: “Al entrar en un mercado (IBEX o S&P500 seguramente hay sectores o compañías en las que nunca invertiría); dar el peso a un valor por su volumen de capitalización no creo que sea el mejor argumento; los criterios ISR o ESG no priman en el criterio de selección e incluso, aunque algo no nos gustara o estuviéramos en contra, me temo que el ETF seguiría invertido; y si es de renta fija, todavía peor porque las empresas más endeudadas son las que más ponderan”.

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