MAPFRE se mantiene como la sexta mayor aseguradora europea de No Vida en Europa

MAPFRE se encuentra entre las 15 principales entidades aseguradoras de Europa, según la última edición del ranking anual que elabora MAPFRE Economics, el servicio de Estudios de MAPFRE. En concreto, se mantuvo sin cambios en 2020, tanto en la undécima posición en la clasificación del negocio total, como en el sexto puesto entre las aseguradoras No Vida.

La clasificación sigue estando liderada por AXA, que el año pasado alcanzó un volumen de primas de 93.915 millones de euros, un 5,9% menos que el año previo. El volumen de primas de los 15 mayores grupos aseguradores europeos se redujo un 4,9% en 2020, hasta los 567.730 millones de euros. No obstante, el volumen de primas agregado de estos grupos en el segmento de No Vida registró un ligero incremento del 0,7% respecto a 2019, lo cual es un dato positivo si se tienen en cuenta las circunstancias tan complejas en las que se desarrolló la actividad.

El segmento de Vida se vio especialmente afectado por la crisis generada por la pandemia, así como por la prolongación del entorno de bajos tipos de interés. De esta forma, los 15 mayores grupos aseguradores europeos en este segmento de negocio, liderado por Generali, Axa y Prudential, registraron un descenso del -11,0% en los ingresos por primas.

Pese al fuerte impacto en el negocio de la crisis del Covid-19, que también ha provocado una caída del resultado neto del 19,8%, hasta los 27.864 millones de euros, destaca la resistencia del sector en términos de solvencia. De hecho, hay diez de los 15 grupos que cerraron 2020 con mejoras importantes, como es el caso de MAPFRE, cuyo ratio pasó del 186,8% al 192,9%. A 31 de marzo, lo ha mejorado además en otros ocho puntos más hasta situarlo en torno al 200%, el punto medio de su marco de referencia y el doble del capital exigido por el regulador.

La principal respuesta de los aseguradores europeos ante la pandemia ha sido, por una parte, velar por la seguridad y salud de sus empleados y, por la otra, trabajar por la continuidad del negocio y cumplir con sus obligaciones contractuales, proporcionando al cliente un adecuado servicio y asesoramiento. “El confinamiento y el distanciamiento social han supuesto un reto en las políticas de continuidad de negocio de las aseguradoras, acelerando los procesos de digitalización que ya estaban en marcha y dando lugar a una transformación que ya se percibe imparable”, explica MAPFRE Economics en el informe. “A lo anterior hay que añadir la puesta en marcha de medidas excepcionales, movilizando recursos para dinamizar la economía a través de donaciones directas a la sociedad y medidas para ayudar a los asegurados, especialmente a las pequeñas y medianas empresas y autónomos. Estas medidas se han complementado en muchos casos con otras iniciativas de carácter solidario”, concluye el servicio de Estudios. En el caso de MAPFRE, la compañía ha movilizado más de 200 millones para ayudar a autónomos y pymes. Las donaciones directas de su fundación a instituciones públicas y privadas han ascendido a 45 millones de euros para atender emergencias y la ayuda humanitaria en casi 30 países.

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