ECONOMÍA| 06.11.2024
¿Qué tienen en común el descontento social y la respuesta de los Estados en los países de Europa y Asia?
Gonzalo de Cadenas-Santiago, subdirector general de MAPFRE Economics, ha hablado en la conferencia de expertos de la OTAN sobre investigación acerca de estas dinámicas. La evidencia muestra una alta volatilidad social en Eurasia, especialmente en la región occidental y central, un fenómeno del que se encuentran ejemplos recientes en Armenia, Azerbaiyán, Moldavia o Georgia.
La 18ª Conferencia de Investigación y Análisis de Operaciones de la OTAN se ha celebrado en Málaga del 4 al 6 de noviembre, reuniendo a expertos de diversos países para debatir sobre el uso de la investigación avanzada y el análisis en la toma de decisiones estratégicas en entornos complejos. Bajo el tema “Colaboración para una ventaja militar en un mundo inestable”, la conferencia ha explorado cómo el análisis operativo y el Big Data pueden contribuir a la resiliencia y la adaptabilidad de los Estados miembros frente a desafíos emergentes en ámbitos como la ciberseguridad, la sostenibilidad y las operaciones multidominio. Los paneles incluyeron temas sobre tecnología emergente, simulación logística, y una sesión de Big Data, donde se destacó el papel de esta tecnología en el análisis de dinámicas sociales y su potencial para anticipar respuestas estatales.
En esta sesión de Big Data, Gonzalo de Cadenas-Santiago, subdirector general de MAPFRE Economics, presentó su ponencia “Evaluación empírica de las dinámicas de descontento social y la respuesta estatal en los países de Eurasia”. Su intervención se centró en el análisis del descontento social y las respuestas estatales en Eurasia, un estudio que muestra similitudes con las dinámicas observadas en Europa y Asia en términos de volatilidad social y reacciones gubernamentales. Esta temática está especialmente vigente en la actualidad, a la luz de los eventos registrados hace unos meses en Armenia y Azerbaiyán y más recientemente en Moldavia y Georgia.
Utilizando la base de datos GDELT (Global Database of Events, Language, and Tone), de Cadenas-Santiago y sus compañeros desarrollaron un marco analítico que utilizando índices en tiempo real que hacen seguimiento de las diferentes fases psicosociales (vindicación, protesta y conflicto) y midiendo las respuestas de los Estados, que oscilan entre la represión y la cooperación, les permite entender la sensibilidad y la relación de entre los diferente estados psicosociales de los diferentes países así como su anticipación. El análisis del documento revela una alta volatilidad en las regiones euroasiáticas, donde la reactividad social se intensifica en las etapas iniciales del disturbio pero disminuye a medida que la situación se agrava. Asimismo, las respuestas de los Estados tienden a ser inicialmente represivas, aunque estas se vuelven más acomodativas conforme el conflicto avanza, un cambio que se atribuye a las limitaciones de las capacidades de control.
El estudio también señala que Eurasia Occidental y Central son particularmente propensas a la escalada de conflictos y enfrentan dificultades significativas en términos de capacidad de control estatal, con efectos de contagio de disturbios entre países vecinos. Al comparar Eurasia con la región MENA (Oriente Medio y Norte de África), se observó que presenta dinámicas similares, aunque menos intensas, en cuanto a volatilidad, reactividad social y respuesta estatal. Esta investigación de MAPFRE Economics proporciona información clave para comprender la estabilidad social y la resiliencia estatal en áreas geopolíticamente sensibles.
En la actualidad la herramienta es utilizada por MAPFRE Economics para hacer seguimiento predictivo de protestas y crisis sociales en 60 países.