Viviendo el deporte en la arena virtual
¿Qué ha cambiado en el deporte y la afición, si no ha sido la llama? A puerta cerrada y por streaming se han celebrado eventos como La liga de Campeones o la Bundesliga. Competiciones tan mediáticas como los maratones de Boston, Londres o París han tenido que ser canceladas. Carreras en solitario con duración minutada online, juegos sin público o eventos virtuales, dependiendo del caso, del país y la situación pandémica es lo máximo que hemos podido disfrutar aficionados e interesados durante el confinamiento.
La industria deportiva mueve una cantidad global de 766.000 millones de dólares anuales, pero sobre todo mueve pasiones. De ahí que haya sido tan importante la faceta humana de los deportistas más respetados en estos meses, que han compartido recomendaciones de salud, aspectos íntimos de su vida y mensajes solidarios.
Reflexionamos sobre lo que ha supuesto este periodo con Daniel Ricciardo, piloto del Renault DP World F1 Team:
Salud y equilibrio emocional
Para muchos, el ejercicio en casa -aun sin equipos y dentro de un espacio limitado- es posible. Para cuantos permanecen mucho tiempo sentados, hay opciones para estirar el esqueleto, activarse durante la realización de tareas domésticas, subir escaleras o bailar al son de la música. En Internet existen recursos gratuitos para mantener la actividad, así como juegos de fitness, tutoriales gratuitos en redes sociales, apps de meditación, de yoga y clases de baile para toda la familia. Los propios centros educativos proporcionan a los jóvenes recursos de aprendizaje online, y muchos gimnasios y centros de fitness ofrecen suscripciones rebajadas que incluyen el acceso a vídeos y monitores online en plataformas virtuales.
La arena online ha hecho por reemplazar a la tradicional, multiplicando soportes y contenidos de entretenimiento: el mundo del videojuego ha hecho su agosto. La reconocida franquicia Electronic Arts, según datos recientes de Bloomberg Intelligence, agregó 7 millones de jugadores nuevos en el segundo trimestre, duplicando el agregado del año anterior, y el popular videojuego de la NBA 2K20 creció un 82% en jugadores activos. Conforme avance la normalidad, remitirá seguramente la nostalgia, pero quedarán los grandes profesionales, los soportes y el recuerdo de cómo el mundo se las ingenió para encontrar sustitutivos de su mayor afición.