¿Es mi hogar eficiente?

Un hogar eficiente es aquel capaz de mantener un nivel de confort igual o superior que otro hogar similar, pero consumiendo menos energía. Es decir, además de ser más sostenible, permite ahorrar en la factura energética.

Con la colaboración de la Asociación de Empresas de Eficiencia Energética (A3E) y la plataforma energética Hobeen, te detallamos algunas acciones que puedes poner en práctica en tu vivienda y tus hábitos de consumo para reducir los gastos de luz, gas y agua.

• Aislamiento y ventilación, ¡evita que el calor se escape!

¿Ves ese pequeño espacio entre la puerta y el suelo? Es lo que se llama puente térmico. Por ahí se escapa el calor generado por la calefacción en invierno y entra el calor exterior en verano. Para bloquear el paso, puedes colocar burletes. En cuanto a las ventanas, es recomendable el doble acristalamiento para conseguir un mayor confort térmico.

• No obstruyas tus elementos de climatización

Los radiadores emiten calor. Si los tapas, estarás despilfarrando energía, ya que solo se calentará el elemento puesto encima. En cuanto a los aparatos de aire acondicionado, para lograr mayor eficiencia tienen que estar alejados de cualquier fuente de calor (sol, horno, bombillas, etc.).

• Ojo con tus viejos electrodomésticos

Más del 55 % del consumo eléctrico de una casa procede de los electrodomésticos y, entre ellos, el frigorífico es el que más energía gasta. Si tu nevera tiene una antigüedad superior a 10 años, deberías considerar sustituirla por otra más eficiente. Para otros electrodomésticos cuyo consumo también es elevado (como la plancha o la secadora), es importante hacer un buen mantenimiento.

• Ilumina tu casa a bajo coste

¿Te atreves a contar cuántas bombillas tienes en tu casa? Hoy en día, nuestros hogares tienen una cantidad elevada de fuentes de luz. En este caso, si todavía no lo has hecho, te aconsejamos sustituir tus viejas bombillas por fuentes LED para ahorrar en electricidad sin reducir el nivel de iluminación.

• Controla la temperatura de tu casa

En invierno, es suficiente con mantener una temperatura de 19 °C cuando estás en casa. Durante la noche y cuando estés fuera, apaga la calefacción para evitar un sobrecoste en tus facturas por haber generado energía que no vas a aprovechar. La mejor manera de controlar esa temperatura es mediante el uso de un termostato inteligente con el que encender, apagar y programar tu calefacción.

• Optimiza tus consumos gracias a una aplicación móvil

Una gran ventaja de la digitalización de nuestras vidas es el poder controlar dispositivos en remoto desde nuestro teléfono inteligente. Hoy en día, existen aplicaciones, como la de Hobeen, que te permiten monitorizar todo el consumo de tu casa para que tu hogar sea lo más eficiente posible.

• Minimiza el consumo fantasma

Cargadores, TV, router, videoconsolas, microondas, etc. ¿Sabías que todo lo que esté enchufado consume energía y puede llegar a representar hasta el 10 % del consumo eléctrico de una vivienda? Prueba a bloquear el paso de la corriente mediante regletas que te permitan desconectar varios aparatos a la vez.

• Utiliza los electrodomésticos de manera inteligente

Es probable que tu lavadora o tu lavavajillas cuenten con programas ECO. Estos modos permiten usar menos agua y menos energía para un resultado final similar a otros programas. En cuanto a la nevera, conviene adaptar su temperatura según las estaciones del año. Te recomendamos ponerla a 4 °C en verano y 6 °C en invierno.

Hasta aquí algunos consejos que tú mismo puedes aplicar, de forma sencilla, para aumentar la eficiencia de tu hogar y el potencial de ahorro energético. En MAPFRE promovemos y difundimos los principios de una cultura energética basada en el uso y la gestión responsable de la energía. Si además de eficiente quieres que tu casa sea un lugar seguro, conoce nuestros seguros de hogar, con las coberturas que más se adaptan a tus necesidades para asegurar tu vivienda.

ARTÍCULOS RELACIONADOS: