Prevención de la salud, ¿qué puede hacer la industria aseguradora?

Es cada vez mayor la concienciación que existe en la relación entre el bienestar y la prevención en salud: cuanto mayor es la prevención, mayor mejora de la salud vemos y, con ella, de la calidad de vida. ¿Puede hacer algo el sector asegurador en este terreno? Estos agentes son ya un actor clave en la promoción de estrategias efectivas para combatir enfermedades y mejorar el bienestar.

En la actualidad se vive una extraña paradoja: según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 2023 fue un año récord en la erradicación de enfermedades; sin embargo, enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes y las afecciones cardiovasculares continúan siendo las principales causas de mortalidad a nivel mundial. En este contexto, el sector de los seguros juega un papel clave fomentando medidas preventivas y de detección temprana que pueden reducir tanto la incidencia como el impacto de estas enfermedades en la sociedad.

La prevención en salud resulta fundamental para mejorar la calidad de vida de las personas y es crucial para mantener la eficiencia de los sistemas de salud a largo plazo. Durante la 77ª Asamblea Mundial de la Salud, se puso de manifiesto la importancia de facilitar el acceso equitativo a la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades, con especial atención a las cardiovasculares, que representan una de las principales amenazas para la salud pública a nivel mundial. Las resoluciones presentadas enfatizaron la necesidad de establecer programas integrales que abarquen desde la educación sanitaria hasta la intervención temprana, destacando el consenso internacional y colectivo sobre la importancia de un enfoque preventivo en la gestión de la salud.

El aumento de la consciencia social respecto al bienestar y la reducción de los márgenes operativos de los proveedores de salud impulsan el crecimiento de los servicios de salud preventiva. Con un tamaño de 320.000 millones de dólares, se espera que el mercado de la salud preventiva (tanto digital como no) crezca un 7,8 % anual hasta rozar los 559.000 millones en 2028.

Los avances tecnológicos han permitido poner a disposición de los pacientes innumerables dispositivos para la automonitorización, ya sea con fines médicos, deportivos o de bienestar. En el ámbito de la electrónica de consumo, muchos usuarios tienen interés por conocer sus métricas de actividad y salud. Al mismo tiempo, los avances en genética han saltado del uso científico a la salud de consumo, poniendo test moleculares y análisis genéticos a disposición del ciudadano medio que puede descubrir su propensión a ciertas enfermedades, conocer su sensibilidad a determinadas sustancias y cambiar sus hábitos.

Estos avances dotan al ciudadano de herramientas para tener más conocimiento y control sobre su bienestar, empoderándolo y convirtiéndolo en parte activa de la prevención y el camino hacia una salud mejor.

La OMS sostiene que las enfermedades crónicas son responsables del 74 % de todos los decesos en el mundo. Además, el 80 % de ellas, incluidos los accidentes cerebrovasculares, la diabetes de tipo 2 y las cardiopatías, pueden prevenirse mediante cambios en el estilo de vida. La concienciación pública es indispensable en este contexto de prevención y adopción de mejores hábitos, y las aseguradoras son esenciales para llegar aún más allá.

Si nos centramos en el contexto empresarial, la prevención de la salud no solo es fundamental para reducir el absentismo laboral y aumentar la productividad, sino también para fomentar un entorno de trabajo saludable y sostenible. Por ejemplo, desde Savia, plataforma de salud digital de MAPFRE, no solo se ofrece un enfoque reactivo al tratamiento de enfermedades, sino que se impulsa una cultura de salud proactiva, permitiendo a las empresas adelantarse a posibles problemas de salud de sus colaboradores y actuar de manera preventiva, siempre con el objetivo ya descrito de fomentar un entorno saludable.

«Aquí se unen dos factores. Por un lado, que las personas, especialmente en generaciones como la Gen X, Millenials y Gen Z, están cada vez más preocupados por su salud y quieren monitorizarla prácticamente en tiempo real, al menos los datos más básicos, como es el caso del ritmo cardiaco. Por otro lado, las compañías de seguros tenemos una oportunidad inmensa para ofrecer sugerencias personalizadas a nuestros usuarios con las que puedan mejorar su estilo de vida. Todo ello hace que estemos en el contexto idóneo para potenciar la salud preventiva desde distintos frentes», comenta Pedro Díaz Yuste, CEO de Savia.

La industria aseguradora está inmersa en el wellcare, la convergencia entre salud y bienestar. Se está dando una ampliación y mejora en las coberturas, que poco a poco van integrando en su oferta la salud mental, la telemedicina y nuevas tecnologías y dispositivos enfocados a agilizar el diagnóstico y el seguimiento de los pacientes, así como a prevenir determinadas enfermedades y concienciar sobre ellas.

Las aseguradoras están ofreciendo a sus asegurados aplicaciones para sugerir diagnósticos en condiciones médicas simples y wearables para que los pacientes puedan autogestionar su bienestar. Por ejemplo, en la aplicación de MAPFRE Salud hay una opción de «Evaluador de síntomas» que ofrece una orientación diagnóstica mediante IA en función de una serie preguntas sobre el estado de salud de la persona y sus dolencias; si bien es cierto que no sustituye el criterio médico, ayuda a los pacientes a hacerse una idea mejor de su estado de salud y a actuar en consecuencia.

Precisamente las capacidades de IA y de analítica de datos están ofreciendo un amplio abanico de oportunidades en temas de personalización y prevención de la salud gracias a su capacidad para procesar datos masivos. Con ello, los sistemas de machine learning pueden llevar a cabo diagnósticos y evaluaciones personalizadas con un margen de error escasísimo.

Así, por ejemplo, los algoritmos pueden identificar patrones en los datos de los pacientes que podrían pasar desapercibidos para los profesionales de la salud, facilitando la detección temprana de enfermedades como el cáncer o enfermedades cardiovasculares. También pueden analizar tendencias en la salud de los asegurados para recomendar mejores hábitos en su día a día. Uniendo algoritmos y wearables, los programas de salud pueden ser mucho más ricos para las personas.

«Hace tiempo que la salud dejó de interpretarse como un ciclo cerrado en el que los profesionales solo actúan si se identifica alguna enfermedad. En la sociedad en la que vivimos, es más importante que nunca frenar la cronificación de patologías y actuar de forma preventiva, de ahí que las aseguradoras estemos haciendo un esfuerzo consciente en iniciativas de prevención de salud física y mental», declara Pedro Díaz Yuste. «En Savia, por ejemplo, ofrecemos servicios de salud 360° donde la prevención es uno de nuestros tres pilares a través de servicios de monitorización remota, soluciones de salud digital en cualquier momento o herramientas para gestionar cualquier preocupación del día a día», añade.

El entorno de capital riesgo o venture capital lleva años inyectando liquidez al sector de la salud debido a su claro potencial económico y social. Pocos fondos o inversores de capital privado quieren dejar escapar un mercado de salud digital que, previsiblemente, alcanzará los 426.000 millones de dólares en 2027 y un valor de mercado de más de 981.500 millones de dólares para 2032.

Los actores tecnológicos y las nuevas capacidades digitales han irrumpido con fuerza en este sector, provocando la especialización del ecosistema. Las startups empiezan con una solución muy específica y, al igual que en otros sectores, en los años anteriores a la pandemia apostaban en su mayoría por integrarse en propuestas de valor más amplias mediante alianzas, pues la comercialización directa requiere de un esfuerzo mayor y preferían dedicar esos recursos al desarrollo de la tecnología. Sin embargo, en los últimos dos años este enfoque ha cambiado: el auge de la telemedicina y el apetito de los inversores por el sector han permitido la proliferación de los modelos B2C.

Dentro de estas startups, cada vez hay más compañías enfocadas en la prevención, creando valor a partir de los datos. En un mercado altamente competitivo como es el de la salud, la creación de alianzas multidireccionales es una práctica cada vez más extendida: un nuevo agente puede llegar con su oferta a una mayor masa de consumidores o pacientes, y empresas tradicionales, como es el caso de las aseguradoras, pueden ofrecer a los asegurados un mayor valor añadido en sus pólizas y servicios con mayor agilidad.

«Las alianzas entre insurtechs enfocadas al ámbito de la salud y compañías aseguradoras ofrecen más valor que nunca en materia de prevención. Cuando se trata de la vida y salud de las personas, actuar con rapidez y ofrecer ya no solo servicios de prevención, sino programas específicos para cada persona, es fundamental, y eso se consigue a través de estrategias de innovación abierta y de forjar alianzas que aporten un valor a todas las partes: startups, multinacionales y, por supuesto, personas», señala Carlos Cendra, Scouting & Investment Lead en MAPFRE Open Innovation.

Por ejemplo, Savia ha establecido una colaboración estratégica con Wellwo, startup especializada en bienestar corporativo, para ampliar su oferta de servicios preventivos dirigidos a empresas. Esta alianza permite a Savia integrar la experiencia de Wellwo en programas de salud mental, bienestar emocional y actividades físicas, creando una propuesta de valor más completa para las empresas que buscan mejorar la salud de sus empleados.

Otra colaboración de Savia en el ámbito de la salud es con Mediktor, plataforma de inteligencia artificial especializada en la evaluación de síntomas, para mejorar su capacidad de diagnóstico preventivo y atención temprana en el entorno empresarial. Esta integración permite a Savia ofrecer a las empresas una herramienta de salud digital que puede ser utilizada en cualquier momento, facilitando la detección temprana de posibles afecciones y mejorando la experiencia del usuario con respuestas rápidas y personalizadas.

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