ECONOMÍA| 24.10.2022
¿Qué es la reduflación y cómo afecta a tus finanzas personales?
La educación financiera nos permite tomar las mejores decisiones a lo largo de nuestra vida, decisiones que condicionarán nuestro futuro. Por eso, en MAPFRE promovemos la educación y la cultura financiera. Hoy, y para que puedas entender alguno de los términos que son tendencia, hablamos de “Reduflación”.
Reduflación nace de la unión de los términos reducción e inflación, dos términos que definen y resumen a la perfección esta práctica. Se trata de reducir la cantidad del producto para que no se note la subida de precio del mismo, es decir, por el mismo precio obtienes menor cantidad.
El concepto reduflación o shrinkflation (en inglés) nació en 2010 en plena crisis económica como una práctica cada vez más habitual en supermercados tal y como nos alerta la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España. Esta práctica legal pretende enmascarar la subida de los precios debido a la inflación que está afectando a los costes de producción de los productos. En el artículo de hoy te contamos todo lo que debes saber sobre la reduflación y cómo hacer frente a ella.
¿Cómo nos afecta la reduflación?
Podemos notar esta práctica en nuestra compra habitual, en los productos de consumo de primera necesidad, aquellos que son básicos como alimentos en conserva, arroz o pasta, otros no esenciales como salsas y dulces, y también en artículos de higiene personal como jabones líquidos o pasta de dientes. Por ejemplo, hay productos de primeras marcas que han reducido hasta en un 25 % su contenido manteniendo el anterior importe para crear la sensación de no haber encarecido los precios. De hecho, el gasto medio mensual por hogar en alimentos y bebidas no alcohólicas en 2021 fue de 400,46€ según el Instituto Nacional de Estadística y se espera que cerremos 2022 con una media superior todavía.
¿Por qué se aplica esta práctica?
Esta práctica está en auge en estos últimos meses debido a la inflación que afecta a las industrias, que están experimentando subidas en los costes de producción, tanto por el incremento de precio de las energías de las que se abastecen las fábricas como de la materia prima para confeccionar el producto final. Además, la reduflación apela a nuestra percepción ya que en lo primero que nos fijamos es en el precio y si este sigue siendo el mismo, no nos damos cuenta de la situación.
Consejos para no caer en la reduflación y cuidar tus finanzas personales
Estas son algunas pautas que pueden ayudar a realizar tu compra de la manera más eficiente posible y al mismo tiempo cuidar de tus finanzas personales.
- Prepara la lista de la compra
Puede parecer un consejo muy básico pero la realidad es que, cuando entramos en un supermercado sin objetivos específicos, podemos caer en las compras de caprichos y ofertas que en realidad no necesitamos, por lo que es aconsejable preparar una lista de la compra antes de salir de casa.
- Revisa el recibo
Conservar los recibos de tus compras es una buena idea para poder comparar los precios posteriormente. Así podrás saber qué productos han subido de precio, en cuáles ya no hay promociones u ofertas e incluso en cuáles han aplicado la reduflación.
- Compara el gramaje de los productos
Te aconsejamos cambiar tu manera de mirar los productos. Estamos acostumbrados a elegir nuestras compras según el precio más atractivo o las ofertas vigentes, pero te proponemos un ejercicio de reflexión: compara el precio por gramos, kilos o litros y no por el pack completo. Ahí será cuando realmente podrás ver el coste y si ese producto sufre de reduflación o no.
- No caigas en falsas ofertas
Si tu producto favorito ha bajado de precio podría ser que también haya bajado de cantidad y esta oferta solo sea una estrategia de marketing para, una vez más, afectar a tu percepción del precio del producto.
- Compara en varios supermercados
Como ya sabrás, algunos productos varían de precio según dónde los compres. Una misma marca puede tener distintos precios, ya que el precio final del producto lo determina el supermercado y estos se llevan un porcentaje de beneficio por venta, por lo que estos precios pueden variar.
En resumen, nuestro consejo es que hagas un trabajo de análisis y comparación de tu cesta media, con los alimentos y productos que habitualmente consumes, en distintos supermercados y con distintas marcas, teniendo siempre en cuenta la calidad de los mismos y tus gustos. Este esfuerzo inicial te ayudará a poder organizar mejor tu economía y a llevar un seguimiento de tus gastos recurrentes e imprescindibles.
¿Es legal esta práctica?
La realidad es que sí que es legal, aunque pueda considerarse una práctica engañosa e incluso competencia desleal, ya que el correcto etiquetado de los productos la convierte en algo permitido. Por eso es tan importante que prestemos atención a nuestras compras para evitar, en la medida de lo posible, caer en este tipo de consumo.
En MAPFRE promovemos la educación financiera con consejos para que nuestros clientes puedan tomar las mejores decisiones económicas y cuiden sus finanzas personales. En este caso hemos visto cómo podemos analizar nuestras compras habituales de productos de primera necesidad para hacerlas de manera óptima y sufrir menos las consecuencias de la inflación.
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