COMPROMISO| 21.07.2021
Fundación MAPFRE se une a la Primera Dama de Panamá en torno al programa solidario por la niñez
Las ayudas, que también se dirigen a las personas mayores en residencias y comedores sociales, se enmarcan en el plan de ayudas a LATAM contra el impacto de la Covid-19, que este año recibe 10 millones adicionales.
Fundación MAPFRE ha respaldado el proyecto Panamá Solidario por la Niñez con el objetivo de aportar alimentación y nutrición a menores de entre 0 y 8 años y a hogares de adultos mayores que viven en condiciones de pobreza y han sido duramente afectados por la pandemia de COVID-19.
La donación de Fundación MAPFRE, de $152,000 balboas (más de 128.000 euros), servirá para comprar leche, cereales y pañales desechables, así como suplementos alimenticios y pañales para adultos mayores que lo necesitan en distintas residencias y comedores del país, colaborando así con la asociación impulsora: Pro-Obras de Beneficencia del Despacho de la Primera Dama.
“Contar con el apoyo de la Fundación MAPFRE para ampliar nuestro alcance e impacto, hace una gran diferencia. Este acuerdo nos permitirá llegar a más familias, y, por ende, a más niños y niñas, cuyo desarrollo físico y emocional están en riesgo. Pero, no solo ayudaremos a niños. Agradezco el noble gesto de incluir a nuestros adultos mayores en este convenio. Definitivamente habla mucho de los valores, compromiso y responsabilidad social de MAPFRE y su fundación”, Yazmín Colón de Cortizo, Primera Dama de la República de Panamá.
Ante la situación de emergencia generada con motivo de la crisis del coronavirus, Fundación MAPFRE destinó en 2020 35 millones de euros a distintos proyectos de ámbito internacional, y ha aprobado para este año una dotación extraordinaria de otros 10 millones de euros para acciones que permitan reducir el agravamiento de la crisis en Latinoamérica.
Gracias a estas ayudas se pondrán en marcha 47 proyectos dirigidos a unas 168.000 personas de 18 países a fin, como en este caso, de garantizar la alimentación básica y nutrición de colectivos especialmente vulnerables, enseñar a las mujeres a emprender para ser autosuficientes y ganar autoestima, digitalizar -especialmente en zonas rurales- y proteger los derechos de personas con discapacidad.
“Tenemos la esperanza de que las cosas cambien y lo hagan para mejor. Ninguna pandemia nos va a hacer renunciar a nuestro compromiso con el progreso social”, destacó Antonio Huertas, presidente de Fundación MAPFRE, cuando se aprobó este plan. “Cuando la solidaridad se pone en marcha no hay quien la detenga”, aseguró.